Nussbaum, folósofa norteamericana, señala que "la economía precisa de la filosofía para ser sensible a las personas"
Periódico la Vanguardia |
26/10/2012 -
Nussbaum, en la ceremonia de entrega de los Príncipe de Asturias en el Teatro Campoamor ovetense, tras agradecer un premio por el que se siente "conmovida y humildemente honrada", ha recordado que lo recibe por su trabajo en colaboración con economistas sobre el enfoque del desarrollo humano, que ella denominó teoría de las capacidades.
La filósofa estadounidense ha sostenido que el crecimiento económico medido por el PIB per cápita no es suficiente para evaluar la calidad de vida de un país, porque "no capta qué es lo que la gente está luchando por conseguir" y puede dar una alta calificación a naciones que guarden importantes desigualdades de oportunidades.
"Una nación puede tener un alto crecimiento sin libertad política o religiosa, pero la gente desea tener una voz sobre su vida política y moral", ha incidido. Nussbaum, por ello, ha señalado que la economía no debe centrarse de forma exclusiva en el crecimiento, porque "en el fondo se trata de una disciplina normativa enfocada en las personas" y precisa "lo que tenía en sus inicios, el 'input' de la filosofía, para articular los objetivos de una sociedad que sea sensible a las personas".
Una vez que ha subrayado "la importancia que tiene la filosofía para la economía", Nussbaum ha apuntado otra de las orientaciones de su labor académica -que desarrolla en la Universidad de Chicago tras doctorarse en Harvard-, que es necesaria una educación bien fundada en las humanidades para que las sociedades mantengan la lucha por la justicia.
Martha C. Nussbaum (Nueva York, 1947) se doctoró en filosofía por la Universidad de Harvard en 1975, tras haber estudiado teatro y estudios clásicos en la de Nueva York. Es una de las pensadoras más leídas de los últimos años y en septiembre de 2005 las revistas Foreign Policy y Prospect la incluyeron entre los cien intelectuales más influyentes del mundo. Sus trabajos se han centrado especialmente en el terrero de la filosofía antigua, la filosofía política y la ética y el derecho, sin olvidar sus decisivas aportaciones al estudio de las emociones. Entre sus obras más recientes traducidas al español figuran La terapia del deseo (2003), El conocimiento del amor (2005), El ocultamiento de lo humano (2006) o Las fronteras de la justicia (2007).